El fomento
de la alimentación alternativa para la crianza de cerdos, a través de la
elaboración de un pienso artesanal, es una realidad en la Estación Experimentalde Pastos y Forrajes Indio Hatuey (EEPFIH), centro investigativo enclavado en
Perico, municipio de la provincia de Matanzas.
De conjunto
con agricultores y productores, especialistas de la EEPFIH, trabajan en la
etapa experimental de esta fuente nutritiva, que sustituye importaciones, con
resultados satisfactorios.
Según
explica el investigador y Doctor en Medicina Veterinaria Yuván Contino
Esquijerosa, “para ello desarrollamos dos grupos de cerdos: de control y
experimental. El primero consume el pienso que proviene de la fábrica de Jaruco
y el otro el elaborado en la
EEPFIH. El grupo nuestro ha mostrado una ganancia superior ante
los recursos locales”.
Estos
resultados, según valora el especialista, “pudieran estar dados porque cuando
se elabora el pienso comercial se hace siguiendo fórmulas matemáticas, además
la transportación provoca un flujo de movilidad que puede influir en las
proteínas. El nuestro posee ingredientes
naturales extraídos de plantas que tienen aminoácidos y proteínas en mayor
concentración que los de base seca elaborados en fábricas a partir de otros
proceso”.
Para la
producción del pienso convencional que desarrollan en la unidad investigativa,
se ha empleado la harina de diversas plantas arbóreas y arbustivas entre ellas:
morera, sorgo, yuca, soya y girasolillo,
entre otras.
“Es un
proyecto de investigación asociado a la producción en el que cerramos ciclo. En
2007 iniciamos los estudios con el follaje, investigación con la que hice mi
tesis de maestría, a partir de ahí empezamos a transitar hacia las harinas”,
añade Contino Esquijerosa.
El
proyecto, con gran aceptación entre los campesinos que ya disponen y dominan la
tecnología para confeccionar el concentrado criollo, necesita un mínimo de
insumos, y solo exige mano de obra para atender la plantación y elaborarlo.
Distingue
además esta producción, el empleo de los microorganismos
autóctonos multipropósitos utilizados para controlar los malos olores de
los cerdos, e incorporado a los alimentos para mejorar la digestibilidad.
Buen trabajo, hay que multiplicar entre los agricultores estos aprendizajes
ResponderEliminar